Debemos consumir pura igualdad

La única manera de avanzar es la EDUCACIÓN, debemos mejorar en el ámbito de la familia para poder avanzar en la sociedad:
Con el ejemplo de los padres se transmite la igualdad.
Debemos consumir pura igualdad. Hay que conseguir que no haya demanda de música, de series, de vídeos, … o de todo tipo de productos que se anuncian obviando el valor de la igualdad. Para que nuestros adultos, adolescentes y niños se rodeen de ambientes igualitarios y cuando puntualmente vean o vivan una situación de discriminación de cualquier tipo, les chirríe algo en la cabeza y se les encienda la alarma para poder actuar. La igualdad debe ser el día a día, lo cotidiano y habitual, para lo cual debe vivirse en casa. Al igual que la violencia genera más violencia, crecer en un ambiente discriminatorio nos hará incapaces de actuar ante la discriminación.
A nivel individual valorándonos (recordando siempre, cuando niños, lo que nuestros abuelos decían de nosotros); a nivel empresarial seguir con políticas de conciliación, con igualdad, dando tiempo a que las mujeres vayan ocupando puestos más relevantes sin caer en políticas de discriminación positiva, de paridad, donde subyace un sentimiento de compasión, de dejarlas ganar, de vamos a ayudarlas porque si no, no pueden. En cada puesto el mejor, sea del género que sea.
Las niñas se sienten capaces de llegar donde quieran, no las hagamos perder ese sueño ni su confianza para lograrlo.