Más allá del ámbito laboral

La principal herramienta para combatir la desigualdad de género es la educación. Una buena educación tanto en casa como en los colegios hará posible que se eliminen los estereotipos y se vayan dando pasos para conseguir la igualdad entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de nuestra sociedad. Tenemos que avanzar en el desarrollo e implantación de medidas de conciliación que resultan claves para la integración de la mujer, no solo en el acceso al mercado laboral sino en el desempeño de puestos de responsabilidad en la propia empresa y en el conjunto de la sociedad.

Pero las empresas no pueden trabajar solas en esta materia, tiene que haber un cambio social, un cambio de mentalidad, por ejemplo en los roles preestablecidos del hombre y la mujer en el ámbito familiar. La conciliación en la empresa se basa en la sensibilidad de la misma con la problemática de las personas que trabajan en ella y, debe ir unida a la flexibilidad. Es importante facilitar que haya un equilibrio entre la vida profesional y personal.

Pero además, cada una de nosotras tenemos que desempeñar una actitud proactiva en defensa de nuestros intereses, sin delegar en la organización la responsabilidad sobre nuestro crecimiento profesional.

Quedan 12 años para llegar al 2030 y alcanzar el objetivo de Naciones Unidas de un planeta 50-50. Pero para llegar a ello, ¡Ahora es el momento!